Sentada disfrutando...

Hace mucho tiempo, no recuerdo muy bien donde, leí que la vida no se cuenta por las inhalaciones, sino por los momentos que se ha cortado la respiración, bueno no sé muy bien si la frase es así, pero aunque no lo haya expresado con exactitud, creo que se entiende perfectamente, habla sobre esos momentos que hacen que tiembles, que se te pare el pulso y sientas el corazón en la garganta, esos instantes que lo son todo, por eso he decidido ser agradecida recordándolos en este post, porque a lo largo de mi vida hubo muchos de esos pequeños grandes momentos.

Así que doy gracias por las sonrisas que iluminan mi vida, por los gemidos llenos de pasión, por el día que nacieron mis hijos, por el abrazo de mis amigos, por la paciencia y la magia, doy gracias por mi familia y cada instante con ellos que hace que se me encoja el corazón, doy gracias por el sol y las estrellas. Estoy agradecida por la lluvia que cae sobre mi pelo alguna que otra mañana, por mi sonrisa, por lo bello que es amar a alguien y que te amen, por las miradas que me han transmitido en los momentos duros, remansos de paz, por cada palabra de animo, por las caricias llenas de pasión, por la alegría de mis hijos, por el ayer he vivido, nada fácil pero vivido. Doy gracias por cada latido y por cada suspiro, por las risas descontroladas y por el placer de los besos, por el poder aprender cada día algo nuevo, por poder pedir perdón y rectificar, por no ser perfecta también doy gracias, por decir te amo en el momento preciso y por sonrojarme casi sin pensarlo. Doy gracias por poder expresar mis pensamientos y por no permitirme ponerle limites a mis sueños, por los libros que he leído y por la música que ha llenado mi vida, doy gracias por cada día, cada noche, cada hora, cada minuto, cada segundo de mis 33 años…¿y tú por que das gracias?